En una noche que parecía rutinaria, Escazú fue escenario de un suceso inesperado que puso en alerta a los bomberos locales. Este lunes, alrededor de las 7:14 p.m., una llamada al 9-1-1 desató una movilización de emergencia cuando una mujer reportó que su casa estaba en llamas, indicando que había mucho humo y afirmando conocer al presunto responsable del incendio.
La Benemérita Cuerpo de Bomberos no perdió tiempo y despachó cuatro unidades extintoras hacia la dirección señalada, en el sector del Cortijo de San Rafael, Escazú. Sin embargo, al llegar al lugar, los bomberos realizaron una primera inspección y se encontraron con una situación completamente distinta a lo que esperaban: no había fuego ni humo, solo una densa neblina que había invadido la casa.
El malentendido fue rápidamente aclarado, y los bomberos pudieron tranquilizar a la residente, asegurando que no había peligro alguno en la vivienda. La neblina, que había causado la confusión, se había reportado esa misma noche en varios otros lugares como Belén, Alajuela e incluso en el aeropuerto Juan Santamaría.
Este curioso incidente ha generado comentarios sobre la necesidad de verificar con precisión las situaciones de emergencia para evitar movilizaciones innecesarias y garantizar que los recursos de emergencia se utilicen de manera efectiva.
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Redacción
